miércoles, 25 de septiembre de 2013

Optimismo y acción


No te quedes en el optimismo de "frase hecha", elige tu acción del día y no se lo dejes al azar.
 
 

martes, 17 de septiembre de 2013

El poder de un abrazo



"Los expertos aseguran que los seres humanos necesitamos 4 abrazos al día para sobrevivir, 8 para regular nuestra salud emocional y 12 para crecer sin dificultades."


El poder que tienen los abrazos para generar y a su vez apaciguar y calmar las emociones que vamos sintiendo a lo largo del día.

 
 
 

lunes, 9 de septiembre de 2013

La educación no consiste en atiborrarse de datos.



Cuando Thomas A. Edison le preguntó a Einstein la velocidad del sonido, él respondió:

No lo sé, procuro no cargar mi memoria con datos que puedo encontrar en cualquier manual, ya que el gran valor de la educación no consiste en atiborrarse de datos, sino en preparar al cerebro a pensar por su propia cuenta y así llegar a conocer algo que no figure en los libros.

prepara-cerebro
 
 

domingo, 8 de septiembre de 2013

El Diamante en tu bolsillo-Gangaji. Autoconocimiento.



(tomado de la Web)




Cualquier pensamiento que hayas tenido sobre ti mismo, pequeño o desmesurado, no es quien eres. Es sólo un pensamiento. La verdad de quien eres no puede ser "pensada", porque ella es la fuente de todos los pensamientos. No se puede definir o darle nombre a la verdad de quién eres. Palabras como alma, luz, Dios, verdad, ser, conciencia, inteligencia universal o divinidad, aunque sean capaces de evocar el éxtasis de la verdad, son insuficientes como descripción de la inmensidad de quien eres realmente. Independientemente de cómo te identifiques: como un niño, un adolescente, una madre, un padre, una persona más adulta, una persona saludable, una persona enferma, una persona que sufre o una persona iluminada - siempre, detrás de todo eso, está la verdad de ti mismo. No es ajena a ti. Está tan cerca que no puedes creer que eres tú.


No existe un concepto para definir la verdad de quien eres, ignorante o iluminado, inutil o grandioso. La verdad de quien eres, está libre de todo eso. Ya eres libre, y todo lo que te impide lograr esa libertad es tu apego a alguna idea sobre quien eres . Este pensamiento no impide que seas la verdad de quien eres. Tú ya eres eso. Te separa del descubrimiento de quien eres realmente. Te invito a dejar que tu atención se sumerga en aquello que siempre ha estado ahí, esperando abiertamente por su propio auto-descubrimiento.


¿Quién eres, realmente? ¿Eres alguna imagen que aparece en tu mente? ¿Eres alguna sensación que aparece en tu cuerpo? ¿Eres tú alguna emoción que pasa por tu mente o tu cuerpo? ¿Eres algo que alguien dice que tú eres? ¿O eres la rebeldía contra algo que alguien ha dicho que eres? Estos son algunos de los muchos errores de identificación. Todas estas definiciones vienen y se van, nacen y después mueren. La verdad de lo que eres, no viene y se va. Ella está presente antes del nacimiento, durante toda la vida y después de la muerte. Descubrir la verdad acerca de quien eres, no solo es posible, es tu derecho de nacimiento.


Cualquier pensamiento de que este descubrimiento no es para ti, que aún no es tiempo, que no eres digno, que no estás listo, que tú ya sabes quien eres, son sólo trucos de la mente. Es hora de investigar este pensamiento y ver qué validez realmente tiene. En esta investigación existe una apertura para que la conciencia inteligente que eres, finalmente se reconozca a sí misma. La pregunta más importante que puedes hacerte es: ¿Quién soy yo?


De cierta forma, esta ha sido una pregunta implícita, hecha en cada etapa de tu vida. Toda actividad, sea individual o colectiva, es motivada en su raíz por una búsqueda de auto-definición. Normalmente, buscas una respuesta positiva a esta pregunta y huyes de una respuesta negativa. Cuando esta pregunta se vuelve explícita, el impulso y el poder de la pregunta orientan a la búsqueda de la verdadera respuesta, la cual está abierta, viva, y llena de una "comprensión" cada vez más profunda. Tú has experimentado tanto el éxito como el fracaso. Después de un cierto tiempo, tarde o temprano, te das cuenta que quien eres, por más que la definas, no es satisfactoria. A menos que esta pregunta haya sido 'verdaderamente respondida', - no sólo convencionalmente respondida - seguirás con el hambre de saber.


Puesto que no importa cómo hayas sido definido por los otros, bien intencionado o no, y no importa cómo te hayas definido a ti mismo, ninguna definición puede traer certidumbre duradera. El momento en que reconozcas que ninguna respuesta jamás ha satisfecho esta pregunta, es crucial. A menudo se lo denomina como el momento de madurez espiritual, el momento de madurez de la vida espiritual. En este punto, tú puedes concientemente investigar quien realmente eres. En su poder y simplicidad, la pregunta "¿Quién soy yo?" lanza la mente de nuevo a la raíz de la identificación personal, la hipótesis básica: yo soy alguien. En vez de automáticamente aceptar esta suposición como la verdad, puedes investigar más. No es difícil ver que este pensamiento inicial de "yo soy alguien", conduce a todo tipo de estrategias: ser un mejor 'alguien', un 'alguien' más protegido, un 'alguien' con más placer, más confortable, más realizado. Pero cuando este pensamiento muy básico es cuestionado, la mente encuentra el yo el cual estaba separado de lo que ella ha estado buscando. Esto se llama auto-investigación.


La pregunta más básica: "¿Quién soy yo?", es la que más se pasa por alto. Pasamos la mayor parte de nuestros días diciéndonos a nosotros mismos o a los demás que somos alguien importante, alguien sin importancia, alguien grande, alguien pequeño, alguien joven o alguien viejo, sin nunca realmente cuestionar esta suposición tan básica: ¿Quién eres, realmente? ¿Cómo sabes que esto es quien eres en realidad? ¿Es verdad? ¿Realmente? Cuando llevas tu atención hacia esta pregunta: "¿Quién soy yo?" tal vez veas una entidad la cual tiene tu cara y tu cuerpo. ¿Pero quién es conciente de esa entidad? ¿Eres el objeto, o eres la percepción del objeto? El objeto viene y se va. El padre, el niño, el amante, el abandonado, el iluminado, el victorioso, o el derrotado. Todas estas identificaciones vienen y se van. La percepción de estas identificaciones está siempre presente.


La errónea identificación de uno mismo como algún objeto dentro de la percepción lleva al extremo placer o extremo dolor y a ciclos interminables de sufrimiento. Cuando estás dispuesto a terminar con la errónea identificación y descubrir directa y completamente que tú eres la propia conciencia y no estas definiciones efímeras, la búsqueda de ti mismo en los pensamientos, termina. Cuando la pregunta "¿quién?" es perseguida de forma inocente, pura, en todo el camino de vuelta a su origen, surge un gran y asombroso descubrimiento: ¡no hay ninguna entidad allí! Apenas el indefinible e ilimitado reconocimiento de ti mismo como inseparable de cualquier otra cosa. Eres libre Estás completo, eres infinito. No hay final para ti, no hay límite. Cualquier idea sobre ti mismo que aparezca desaparecerá de vuelta en ti. Eres la percepción, y la percepción es la conciencia Deja que todas las auto-definiciones mueran en este momento. Déjalas ir, y ve lo que permanece. Ve lo que nunca ha nacido y lo que no muere. Siente el alivio de dejar caer la carga de definirte a ti mismo. Experimenta la verdad de la irrealidad de la carga. Experimenta la alegría que está aquí. Descansa en la infinita paz de tu verdadera naturaleza antes de que cualquier pensamiento de "yo" surja.



Texto extraido del libro "El Diamante en tu Bolsillo" de Gangaji.
 
 

lunes, 2 de septiembre de 2013

DEFINICIONES DE AMOR

Según niños de 4 a 8 años


( tomado de la web)


De una encuesta hecha por profesionales de Educación y Psicología, con un grupo de niños de 4 a 8 años

Respuestas:

“Amor es cuando alguien te incomoda, y tú, aunque estás muy enojado, no gritas, porque sabes que hieres sus sentimientos” Mateos, 6 años

“Cuando mi abuela se enfermó de artritis, ella no se podía agachar para pintarse las uñas de los pies, mi abuelo, desde entonces, pinta las uñas de ella aunque él también tiene artritis” Rebeca, 8 años

“Amor es cuando una niña se coloca perfume y el niño se coloca loción para después de afeitarse, ellos salen juntos y se huelen” Carlitos, 5 años

“Yo se que mi hermana mayor me ama, porque ella me dio todas sus ropas viejas y tuvo que salir a comprar ropas nuevas” Lorena, 4 años

“Amor es como una viejita y un viejito que son muy amigos todavía, aunque se conocen hace mucho tiempo” Tomasito, 6 años

“Cuando alguien te ama, la forma de decir tu nombre es diferente” Patricio, 4 años

“Amor es cuando tú sales a comer y ofreces tus papas fritas, sin esperar que la otra persona te ofrezca las papas fritas de ella” Cristinita, 6 años

“Amor es lo que sentimos en la navidad, cuando tú paras de abrir los regalos y los escuchas” Robertito, 5 años.

“Si tú quieres aprender a amar mejor, debes comenzar con un amigo que a ti no te guste” Maggie, 6 años.

“Cuando tú hablas con alguien de ti, sobre alguna cosa mala, aunque sientas miedo de que esta persona no te ame más por este motivo, ahí tú te sorprendes, ya que no solamente te continua amando, como ahora si no que te ama todavía más” Quenita, 7 años

“Amor es cuando la mamá ve al papá hediondo y de mal olor y dice que es más bonito que Robert Redford” Cristina, 8 años

“Durante mi presentación de piano, yo ví a mi papá en la platea levantando su mano y sonriendo, era la única persona haciendo esto, y yo no sentía miedo” Marcela, 8 años

“Amor es cuando tú le dices a un chico que él está vistiendo una camisa linda y él se la pone todos los días” Noelia, 7 años

“No deberíamos decir te amo sino cuando realmente lo sentimos, y si lo sentimos, deberíamos decirlo muchas veces. Las personas se olvidan de decirlo” Jessica, 8 años

“Amor es abrazarse y besarse, amor es decir no” Paty, 8 años

“Cuando tú amas a alguien, sus ojos suben y bajan y pequeñas estrellitas salen de ti” Karina, 7 años

“Dios debería haber dicho algunas palabras mágicas para que los clavos se cayeran de la cruz, más él no lo hizo. Esto es amor” Max, 5 años

“Amor es cuando tu perro te lame la cara, aunque tú lo dejas solo el día entero”. Anita, 4 años